El Ferry atracó puntual a las 08:00 de la mañana y después de desembarcar lo primero es llenar los depósitos de gasolina a 0'80 €L
Para enseguida acometer el engorroso trámite del paso de la aduana.
Pasada la aduana tocaba ir a una oficina de cambio a conseguir Dirhams, que estaban a 10'75 DH/1 €. Cambiamos 500 pavos cada uno, suficiente para los siete días que pasaríamos por tierras marroquíes. Arturo (Nacex) pasando el "trámite".
Ya en Marruecos empiezas a encontrar las primeras diferencias.
Iniciamos la marcha por carreteras más bien secundarias y a los 100 Km paramos a tomar un té. Me hice esta foto con una chumbera, muy abundantes por esa zona.
Éste es el garito de carretera en el que paramos, y foto de todo el grupo.
Más vale no ser demasiado escrupuloso con los retretes...
Pero, que maleducado soy, aún no os he presentado al grupo:
Joan Ramon, con su GS800 y tres maleras.
David, con una verdadera trailera/off la KTM 990
Potxi, que también vino en GS800
Denis, de nacionalidad francesa y 66 tacos a sus espaldas, conduciendo una GS1200
Arturo (Nacex) y su NC700X a 165 Km de nuestro destino, Fez.
Y servidor de Vds. Tino con la Integra 700 2013.
Aquí todos juntitos.
Después de la presentación tocaba repostar las motos, más que nada para no apurar demasiado. Además todas las otras motos iban con menos autonomía que Nacex y yo, sobretodo las GS1200 y la Katy990
Después de 338 Km llegamos Fez y tomamos algunas curiosas fotos. Esto era una fanfarria que tocaban música típica anunciando una boda que se iba a celebrar.
Estos medios de transporte son los más empleados, tanto en Fez como en el resto de Marruecos.
Nos alojamos en un lujoso Riad donde las habitaciones eran muy típicas.
Y donde degustamos una exquisita y típica comida marroquí.
Con su cervecita y todo.
Después de comer salimos a dar una vueltecita por la ciudad, con un itinerario que nos indicó el dueño del riad. Primero subimos a una colina desde donde se ve toda la parte antigua de Fez, en la que estábamos nosotros.
Seguidamente entramos en la medina por la Porte Bleu.
Luego nos adentramos en la laberíntica medina...
Visitamos la zona del "metal"...
Y finalmente los famosos "curtidores".
Aquí suele hacer muy mala olor, de una mezcla de caca de paloma que usan para desprender el pelo de la pieles, con "peste a bicho muerto" de la descomposición de los restos de carne pegados en la piel. Le añades los aromas que desprenden los tintes y el resultado es nauseabundo. Para acceder te dan unas ramitas de hierbabuena que te pones delante de la boca/nariz, pero tampoco nos hizo mucha falta; habían terminado la jornada laboral y la intensidad había descendido bastante. Además se has hecho la mili te quedas medio inmunizado con el olor a "compañerismo"

Al acabar la visita te muestran todo su genero. Varias habitaciones llenas hasta los topes de artículos de "marroquinería", bolsos, carteras, cinturones, babuchas, chaquetas, chalecos, etc...
Os pongo esta foto por una curiosidad; observad el dumper de la parte izquierda, con el conductor, el copiloto sentado sobre el guardabarros y tres tíos en el volquete. Pues lo vimos en una cuesta abajo muy empinada, bajando a toda leche en punto muerto... Allí las normas de tráfico (excluyendo los límites de velocidad) están bastante relajadas.
Y ya nada más. De noche regresamos al hotel a cenar y descansar, pues mañana nos espera una etapa de más de 550 Km.